Ayer, hablando con un alumno
universitario sobre el sentido de las expulsiones en los Institutos, me comentó
que las expulsiones solo benefician a los profesores. Me sorprendió la velocidad
de la respuesta y su contundencia. Surgió por la expulsión de un conocido, dos
días, por llevar el móvil al Instituto y ser visto por un profesor.
Lo cierto es que en el caso del que
hablamos no se ve ventaja alguna para el alumno, ni para nadie. Quizás para el
profesor que se esmeró en poner un parte con tal fin. La expulsión de un alumno
que quizás no le caiga bien, no cumple sus expectativas o vete a saber…