El pasado viernes 15 de abril de 2011, he recibido una carta del Defensor del Pueblo Andaluz donde me comunica que pasa a estudiar la petición del servicio de comedor para el CEIP Príncipe de Asturias de Torreblanca de los Caños (Sevilla). No tengo confianza en lo que pueda o quiera hacer. Observo que actúa de oficio en algunos casos, según la prensa, y en otros como el que nos toca; y a la experiencia anterior me remito. Mira para otro lado ante las excusas, ciertas o no de la Consejería de Educación. Supongo que somos poco vistosos comunicativamente. Pues no parece importar que estén en peligro, el derecho al Trabajo, a la Educación, a la Igualdad (de género y social)…
Hubo una vez en la que tuve la oportunidad de escuchar al ahora Defensor del Pueblo Andaluz, antes de ocupar el Cargo. Cuando su esfuerzo se centraba en la problemática de las drogodependencias. Incluso me mando su programa de trabajo para que inspirara el que pretendíamos desarrollar (y luego hicimos) en nuestro Barrio. Me gustaría que saliera esa persona en el cargo de Defensor del Pueblo. Entonces seguro que nos podría ayudar.
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